Ante
la falta de ratificación por el Pleno del Ayuntamiento, la Sección
Sindical de CGT considera invalidado el Acuerdo de Cierre de Convenio
Después
de transcurridos más de tres meses desde la ratificación del
Acuerdo por parte de las Secciones Sindicales firmantes, a día de
hoy no se ha producido la necesaria ratificación de la Corporación
para su entrada en vigor.
Dos
intentos ha hecho el equipo de gobierno de llevar a pleno el acuerdo;
en la primera, se retiró el punto antes de debatirlo. En la segunda
ocasión, directamente se desconvocó el Pleno. Por lo tanto, los
acuerdos no pueden entrar en vigor.
No
vamos a entrar aquí en los motivos que el equipo de gobierno tiene o
deja de tener para no haber hecho sus deberes, aún conociendo que la
trenza de enemigos del Acuerdo (el cabo político, el cabo sindical y
el cabo técnico) ha actuado (de manera muy activa) en su bloqueo.
Sea como sea, consideramos que cada palo ha de aguantar su vela, y la
responsabilidad de conseguir la aprobación de los Acuerdos en el
Pleno recae, sola y exclusivamente, sobre el equipo de gobierno.
En
el mismo sentido, hemos de constatar el fracaso rotundo del equipo
de gobierno respecto al proceso de negociación colectiva. Es
inadmisible que, tras casi tres años dando bandazos, el resultado
haya sido el que es.
Haciendo
un poco de historia, hay que recordar dos importantes aspectos del
inicio de la negociación: lo primero, que la denuncia del convenio,
y por lo tanto, de la obligación de negociar uno nuevo, partió del
equipo de gobierno. Visto el viaje a ninguna parte en el que ha
devenido este proceso de negociación, les han sobrado todas las
alforjas. Lo segundo, que en la primera reunión de la Mesa de
Negociación (allá por octubre de 2011, anteayer como quien dice),
la representación de CGT planteó la necesidad de que en la parte
política hubiese una composición que garantizase la aprobación de
los acuerdos en el Pleno, dada la conocida situación en minoría del
Partido Popular (ver imagen del final). Lamentablemente, esta
petición no encontró eco, ni entre los políticos, ni entre los
demás sindicatos. No queremos acrecentar nuestro complejo de
Casandra, pero es indudable que una composición adecuada de la parte
política en la mesa de negociación hubiera dado otros frutos.
Cualquier cosa mejor que el resultado actual, seguro.
Otro
aspecto, criticado por esta sección sindical desde el principio, ha
sido la escasez de representantes políticos en la mesa de
negociación. En el primer periodo, en los tiempos del ya casi
olvidado Emilio García Grande, bajaban dos concejales a la mesa: el
propio Emilio, concejal de Hacienda y Personal, y Mª de la Luz Gómez
concejala de Deportes. Poca representación, pero algo era algo. Tras
la huida a Madrid de Emilio, la representación política se redujo a
la mitad, quedando como única representante política la ya
bi-concejala de Deportes y Personal. Y su asesora, claro. Pero nadie
más. Ningún otro miembro del equipo de gobierno ha participado en
la negociación desde entonces, salvo algún cameo esporádico de la
Concejala de Hacienda y del de Empleo (de los dedos de una mano nos
sobran tres para contar las veces que aparecieron).
Esta
mísera representación política ya nos ofrece alguna pista sobre la
importancia que la negociación colectiva ha tenido para este equipo
de gobierno: la responsabilidad secundaria de una concejala
secundaria.
No
obstante, tras varios meses de acuerdos parciales para capear los
recortes impuestos por el gobierno, finalmente se alcanza un acuerdo
por parte de una mayoría sindical cualificada con la representación
política para cerrar la negociación, que es el que finalmente no ha
sido ratificado por el Pleno.
Ante
el rotundo fracaso, y la desautorización de facto que supone la
ausencia de aprobación de los acuerdos, esta Sección Sindical no
tiene más remedio que exigir la dimisión inmediata de la Concejala
de Personal, ya que si el equipo de gobierno ha decidido que sea
su única representante en la Mesa de Negociación, sobre ella recae
toda la responsabilidad de su fracaso, como hubiera ocurrido con su
éxito de haberse producido. Lo mismo vale para con su asesora,
claro.
Para
terminar, anunciamos a la plantilla que la CGT va a solicitar la
convocatoria de una Mesa General de Negociación, para definir el
marco de relaciones laborales válido, ya que lo más importante
en nuestra opinión es clarificar qué vale y qué no vale a partir
de este momento.
Coslada,
a 21 de Mayo de 2014
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